El sistema solar es un sistema planetario constituido por una estrella que ejerce atracción gravitacional sobre los cuerpos celestes que giran a su alrededor. Según la NASA, se cree que nuestro sistema solar se formó a partir de una sola nube plana de gas. Otra teoría, indica que se formó cuando un objeto de gran tamaño pasó cerca del Sol, y empujó una corriente de gas lejos de él. Esta última explicación sugiere que los planetas surgieron de esta corriente gaseosa.
Independientemente de cómo fue su origen, la agencia espacial estadounidense estima que este complejo sistema existe desde hace más de 4 mil millones de años.
Cómo está formado el Sistema Solar
Principalmente, está compuesto por el Sol y los elementos que lo orbitan. Ubicado en un brazo exterior de la Vía Láctea, alberga mucho más que a la Tierra y que a otros planetas conocidos.
El Sol, la estrella principal de este entramado espacial, está en el centro de la organización de los elementos, tiene forma elíptica (ovalada), y es el objeto espacial más grande del sistema: representa 99% de la masa total.
El sistema solar es un sistema planetario constituido por una estrella que ejerce atracción gravitacional sobre los cuerpos celestes que giran a su alrededor. Según la NASA, se cree que nuestro sistema solar se formó a partir de una sola nube plana de gas. Otra teoría, indica que se formó cuando un objeto de gran tamaño pasó cerca del Sol, y empujó una corriente de gas lejos de él. Esta última explicación sugiere que los planetas surgieron de esta corriente gaseosa...
Independientemente de cómo fue su origen, la agencia espacial estadounidense estima que este complejo sistema existe desde hace más de 4 mil millones de años.
¿Qué otros elementos tiene el Sistema Solar?
Entre los demás objetos que integran el sistema solar se encuentran los asteroides (objetos espaciales rocosos que pueden tener kilómetros de diámetro) y los meteoroides (pequeños fragmentos de materia, similares a la piedra o al metal). Estos elementos se pueden encontrar, por ejemplo, en el Cinturón de Asteroides, una región entre las órbitas de Marte y Júpiter.
Uno de los planetas más llamativos del Sistema Solar captará la atención de los observadores a partir de marzo de 2025. Se trata de Saturno, cuyos anillos desaparecerán de nuestra vista por un tiempo, informa el Instituto Smithsonita (organización educativa de Estados Unidos que lleva a cabo investigaciones científicas e históricas y gestiona museos locales). Pero, ¿cómo se producirá este fenómeno?
¿Cómo se formó el sistema solar?
Los científicos tienen múltiples teorías que tratan de explican cómo se formó el sistema solar, sin embargo, una de las más aceptadas propone que antes de existiera el sistema solar, su lugar lo ocupaba una enorme nube de gas molecular que se acumulaba cada vez en mayores cantidades y densidad debido a las bajas temperaturas que imperan en la mayor parte del Universo.
La teoría parece indicar que llegado cierto momento, bien debido al colapso gravitatorio de este gas interestelar (acreción por gravedad), o bien motivado por un aporte de energía procedente de la explosión de una estrella o supernova cercana, tuvo lugar el nacimiento de una protoestrella.
Esta protoestrella, es decir, nuestro Sol en estado gestación, continuó atrayendo gas y materia formando un disco de material alrededor de la misma y a partir del cual se formarían los planetas. Posteriormente, la protoestrella alcanzaría una densidad y presión suficiente como para que en su interior se iniciasen los procesos de fusión nuclear que caracterizan a estos astros, convirtiendo en su seno el hidrógeno en helio, y dando lugar a su vez al origen del viento interestelar que limpió de escombros las órbitas de los planetas actuales.
Durante todo este proceso y a partir de todo el material que no se incorporó al Sol, también se formaron los planetas, lunas o asteroides. Como decíamos, este material formó un disco masivo alrededor del Sol primitivo. En el interior del disco quedaron los materiales más pesados, los cuales se unieron a causa de la misma gravedad dando origen a los planetas rocosos. Tras formarse el Sol, el viento solar también arrastró los materiales más ligeros al exterior del sistema solar, donde se produjo la formación de los gigantes gaseosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario